Los cambios en los Relevos y la apreciación de los Jueces.

Sergio Valiente Gómez
Director Técnico FECNA

Algunas experiencias importantes. A propósito de la dificultad para apreciar con exactitud lo que sucede. La importancia definitiva de los tacos con sensores. En su defecto, la necesidad de utilizar videos. Proteger a los nadadores, lo más importante de todo.
1. Introducción. En ocasión de los XV Juegos Centroamericanos y del Caribe realizados en Ponce, Puerto Rico, en Noviembre de 1993, tuve la oportunidad de observar con mucha atención un cambio en la prueba de 400 m Relevo Combinado masculino, realizado en 0.01 centésima de segundo a favor del nadador que partía del taco en el último tramo, el que corresponde a los 100 m Libre. La impresión que recibí es que ese nadador se había escapado ampliamente antes que su compañero de equipo tocara el panel del cronometraje electrónico. Como estaba detrás de la mesa de control solicité al “Mono Botero”, amigo caleño ya fallecido, quien manejaba el computador, que imprimiera la tira para saber cuanto tiempo antes se había lanzado al agua el nadador referenciado. Fue entonces que conocí que no estaba descalificado, por cuanto tenía a su favor la centésima de segundo ya mencionada antes. Debo agregar que el relevo era de mi equipo y mi apreciación no lo favorecía para nada. Si no hubiéramos tenido sensores jamás hubiera protestado la descalificación, por considerarla justa. El “Mono Botero” me dijo: “Es la segunda mejor salida que he visto en Relevos en los muchos años que vengo ejerciendo la mesa de control en Campeonatos Mundiales, Olímpicos, Panamericanos, etc. El mejor cambio que aprecié fue en Seúl 88 en un relevo de Estados Unidos, que cambió en 0.00, el único cambio perfecto que conozco. Esta de hoy es la segunda mejor salida que he presenciado”. Para mi fue una experiencia inolvidable, pues mis ojos me engañaron, aún cuando era mi equipo.
Tuve otra importante experiencia en materia de cambios de relevos. Esta vez fue en XII Juegos Centroamericanos y del Caribe, el año 1982, en La Habana, Cuba. Habíamos adoptado un acuerdo en la reunión técnica preliminar, en el sentido de colocar videos y filmar los cambios de relevos. Sucedió que el Relevo Combinado de México, también de hombres, fue descalificado. El delegado elevó la protesta correspondiente y tuvimos que observar la grabación. Y la vimos en cámara lenta, hasta detenerla completamente al momento preciso del cambio. El último relevista mexicano estaba totalmente volando, pero con el dedo gordo de cada pié pegado todavía al taco, mientras simultáneamente el tercer hombre tocaba los paneles con ambas manos. México ganó la protesta y la medalla de oro.
Todos apostamos a que se había robado la salida y todos nos equivocamos. Pero eso fue lo que vimos, eso fue lo que nuestros ojos nos mostraron.
Hay otra experiencia observada en Colombia en 2007, en el Nacional Interligas realizado en Cartagena ese año. Un relevo fue descalificado por salida adelantada en uno de los cambios. Cuando se revisó el sensor, ya que los tacos de Cartagena tienen sensores, este indicaba 27 centésimas de segundo a favor del deportista que supuestamente había salido adelantado. Obviamente no fueron descalificados. 2. Limitaciones del ojo humano. Como resultado de estas tres experiencias prácticas anteriores, y al haberlo comprobado personalmente e incluso con tu propio equipo de relevo, se llega a la conclusión que lo apreciado a cierta distancia de los nadadores es muy subjetivo, es poco real, pues lamentablemente el ojo humano no capta con la precisión requerida lo que está sucediendo simultáneamente en dos dimensiones diferentes. Por las razones antes expuestas siempre digo que la mayoría de las descalificaciones de relevos son desproporcionadas y no se corresponden con la realidad. Con esto no acuso a nadie, ni pretendo demeritar la labor abnegada de jueces y árbitros. Estoy absolutamente convencido que no hay mala fe de parte de ninguno de ellos, ni en Colombia ni en el exterior, pues el problema es tan universal como las opciones del ojo humano de captar detalles tan exquisitos. Es ahí donde radica el problema real, en la capacidad de captar dos hechos simultáneos, el toque del panel abajo y el despegue del taco arriba, unos 60-70 cm. de distancia entre una y otra posición. Si se le agregan otros elementos, como la distancia del Juez respecto del carril donde se producen los hechos, si además es de noche, entonces es imposible asegurar que ha habido una salida adelantada. ¿Cuál es la evidencia? ¿Cómo se puede demostrar? ¿Cómo se puede afirmar? Personalmente no confío en absoluto en las apreciaciones a distancia de los cambios de relevos y creo que en la inmensa mayoría de los casos son erróneas, donde quiera que se produzcan, sin importar región, país, continente. Mi conclusión es muy simple: “Sin sensores y sin video es imposible asegurar que habido una salida adelantada”. 3. Decisiones a futuro inmediato. Protección de los nadadores. No quiero analizar casos puntuales de descalificaciones de relevos, pues no pretendo enjuiciar a nadie, mucho menos poner en tela de juicio la total imparcialidad de nuestros jueces y árbitros. Lo único que si pongo en tela de juicio es la capacidad humana para captar visualmente y, con la exactitud que hace falta, los cambios en los relevos, lo que he podido vivir con experiencias como las mencionadas antes. ¿Quién ha visto un cambio de relevos a 0.01 centésima de segundo a favor del nadador que sale del taco? Hay que vivirlo para creerlo y comprenderlo.
Pudiera ser una gran experiencia que los Jueces y Árbitros hicieran algunas pruebas prácticas con los cambios de relevos, fuera de competencia, en piscinas con tacos con sensores, donde impriman cambios y cada vez lancen al agua más temprano al nadador que sale. Así pudieran entrenar la vista a los cambios. Es posible hacerlo en Medellín, Cartagena y Cali, que disponen de esos medios. Pero de lo que realmente se trata es de evitar conflictos futuros y más que todo, de proteger a deportistas que trabajan todo un año para mostrar sus mejores perfomances y se ven afectados por decisiones respetables, pero, desde mi punto de vista, dudosas, sin ninguna seguridad que hayan cometido las faltas que se les señalan. Nuestros campeonatos han crecido mucho y tienen que ser cada vez más eficientes en organización, en la aplicación de tecnologías, en garantías de que el juzgamiento sea tan preciso como los hechos mismos. Por todo ello hay que precisar en los próximos eventos nacionales, sean Interligas o Interclubes, lo siguiente:
 Si se dispone de sensores en los tacos, que estos funcionen.
 Si no funcionan los sensores o no existen, entonces tenemos que recurrir a los videos y nombrar dos personas para que filmen los cambios de relevos.
Este debe ser un tema de debate en los Congresos Técnicos de cada Campeonato Nacional y adoptar la norma que allí se acuerde, que debe tener un solo objetivo: ¡Proteger a los nadadores! Cali, 15 de Junio de 2010.